En un trágico accidente de tránsito, el reconocido boxeador argentino Cristian «Kanguro» González perdió la vida en la Ruta 202 y calle San Ignacio, en Los Polvorines. El joven pugilista, oriundo de Don Torcuato, manejaba su moto cuando, al llegar a una curva,chocó de frente con un auto. A pesar de los esfuerzos por salvarlo, González falleció en el lugar del accidente.
Cristian González era conocido por su historia de superación y esfuerzo. Durante el día, se desempeñaba como recolector de basura en los countries de la zona norte, mientras que por la noche se dedicaba a su pasión por el boxeo.
Su manager, Federico De Lellis, lo describía como un luchador incansable, dispuesto a enfrentar cualquier desafío que se le presentara.Una de las peleas más recordadas de «Kanguro» fue aquella en la que reemplazó a un colega a último momento y se enfrentó al venezolano Ender Luces, quien ostentaba un impresionante récord de 16 nocauts en 19 peleas sin derrotas.A pesar de no lograr la victoria en aquel combate, González ganó un significativo premio económico que le permitió expandir su carrera internacionalmente.
El boxeador argentino tuvo la oportunidad de pelear en tres ocasiones en Canadá, siendo su última presentación el pasado 7 de junio. A lo largo de su carrera, Cristian González demostró su valentía y determinación en cada combate, ganándose el respeto y la admiración de sus seguidores y colegas en el mundo del boxeo.La noticia de su trágico fallecimiento ha conmocionado al mundo del deporte argentino, dejando un vacío en el corazón de todos aquellos que conocieron y admiraron a Cristian «Kanguro» González.
Su legado como boxeador y como ser humano ejemplar perdurará en la memoria de quienes tuvieron la oportunidad de cruzarse en su camino.En este momento de dolor y tristeza, enviamos nuestras condolencias a la familia, amigos y seguidores de Cristian González. Que su espíritu luchador y su pasión por el boxeo sigan inspirando a todos aquellos que sueñan con alcanzar sus metas y superar cualquier obstáculo en el camino. Descansa en paz, «Kanguro».