
El Premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, se pronunció recientemente en su cuenta de la red social X, expresando su preocupación por la decisión de Argentina de votar en contra de la Resolución de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que busca “intensificar los esfuerzos para eliminar todas las formas de violencia contra las mujeres y las niñas”.
En ese marco Pérez Esquivel, reconocido defensor de los derechos humanos y activista social, destacó la singularidad de esta postura, afirmando que “Argentina es el único país del mundo en votar en contra de esta resolución vital”. Su declaración resuena en un contexto donde la violencia de género sigue siendo una problemática alarmante y prevalente en muchas sociedades, incluida la argentina.

En su mensaje, el Nobel de la Paz subrayó que la decisión del gobierno de Javier Milei refleja un “odio” que, según él, aísla al país en el ámbito internacional. Para ilustrar su argumento, Pérez Esquivel comparó la situación de Argentina con la de Afganistán, afirmando que “el odio del régimen de Milei aísla a nuestro país más que los talibanes aíslan a Afganistán”.
Asimismo esta contundente afirmación resalta la gravedad de la situación y la preocupación del activista por las repercusiones que esta postura puede tener en los derechos humanos, especialmente en lo que respecta a la protección de las mujeres y niñas.La condena de Pérez Esquivel pone de manifiesto un profundo desacuerdo con las políticas del actual gobierno, que ha sido objeto de críticas por su enfoque hacia los derechos humanos y la igualdad de género.
Su pronunciamiento es un llamado a la reflexión sobre la responsabilidad de los gobiernos en la lucha contra la violencia y la defensa de los derechos de las mujeres, instando a la sociedad a no permanecer en silencio ante decisiones que pueden tener un impacto negativo en la vida de millones.El rechazo a la resolución de la ONU es visto por muchos como un retroceso en los avances logrados en la protección de los derechos de las mujeres en Argentina, un país que ha sido históricamente un referente en la lucha feminista en América Latina.
Asimismo la crítica de Pérez Esquivel se suma a una serie de voces que claman por una mayor atención y acción frente a la violencia de género, una problemática que requiere un enfoque integral y comprometido por parte de todos los sectores de la sociedad.