Tras la masiva marcha en defensa de las Universidades Nacionales, el concejal radical Roly Moretto utilizó las redes sociales para compartir un mensaje reflexivo en el que abogó por establecer límites necesarios y razonables al dogmatismo extremo en tiempos de crisis. Moretto enfatizó que si bien es cierto que en situaciones económicas difíciles todo puede estar sujeto a recortes, existen dos áreas que deben considerarse intocables: la Salud y la Educación.
La movilización en apoyo a las Universidades Nacionales evidenció el profundo compromiso y la preocupación de la sociedad por la educación superior y la investigación en Argentina. Ante este escenario, Moretto hizo hincapié en la importancia de mantener un enfoque equilibrado y sensato, reconociendo la necesidad de ajustes pero también resaltando la relevancia de proteger sectores fundamentales como la Salud y la Educación.
El concejal radical subrayó que, si bien es necesario adoptar medidas de ajuste en momentos de crisis económica, es imperativo preservar la inversión en Salud y Educación como pilares fundamentales para el desarrollo y el bienestar de la sociedad. La Salud y la Educación, en su opinión, no deben ser objeto de recortes excesivos o indiscriminados, ya que representan derechos básicos de todos los ciudadanos y son esenciales para garantizar una sociedad sana, educada y próspera.
Moretto instó a la reflexión y al diálogo constructivo en torno a la toma de decisiones en materia presupuestaria, destacando la importancia de priorizar el bienestar de la población y el acceso a servicios de calidad en áreas críticas como la Salud y la Educación. Su llamado a establecer un límite necesario y razonable al dogmatismo extremo resuena como una invitación a la prudencia y la responsabilidad en la gestión de recursos públicos en momentos de crisis.
En medio de un escenario desafiante para la economía y la sociedad en su conjunto, las palabras de Roly Moretto invitan a la reflexión sobre la importancia de proteger y fortalecer los pilares fundamentales que sostienen el bienestar y el progreso de la comunidad. Su postura resalta la necesidad de encontrar un equilibrio entre las medidas de ajuste necesarias y la protección de áreas críticas que garantizan la calidad de vida y el futuro de las generaciones venideras.